La exfoliación de la piel es una de las prácticas de cuidado más antiguas de las que se tiene registro. Diversas fuentes afirman que en culturas ancestrales, como la egipcia y la azteca, ya se empleaba ingredientes orgánicos para la elaboración de exfoliantes faciales y corporales. Se valían de aceites y sustancias granulosas para limpiar profundamente su piel.
Y aunque eso pasó hace miles de años, el uso de ingredientes naturales para elaborar exfoliantes no pasa de moda, todo lo contrario, así que hoy te enseñaremos cómo crear un exfoliante facial casero, de manera fácil y efectiva. Toma papel, lápiz y comencemos.
Qué es el exfoliante y cuándo usarlo
Esta es una pregunta frecuente entre nosotras y muchas veces solemos saltarnos este paso de la rutina por no tener una respuesta concreta. El exfoliante es el producto de cuidado facial que se destina para eliminar las células muertas de la piel. Si bien nuestra piel tiene la increíble capacidad de eliminar las capas de la piel que ya no necesita, nuestro agitado estilo de vida complica ese proceso.
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Sí, el uso del maquillaje, la contaminación ambiental, el humo de los carros, etc. Son los principales factores que provocan que nuestros poros de obstruyan y que la piel no pueda deshacerse de las células muertas con real eficacia−hecho que tiene lugar cada 28 días−. Esto, a corto y mediano plazo, se traducirá en el aumento de espinillas, granos y puntos negros.
Cuando exfoliamos la piel, las partículas remueven todo ese exceso de piel muerta y químicos, así que este paso es el que nos asegurará que nuestra limpieza facial sea profunda y que haya una correcta renovación epidérmica.
El saber cuándo hacerlo dependerá mucho de tu estilo de vida y tu tipo de piel, pero en líneas generales se recomienda una exfoliación facial por lo menos una vez a la semana. Sin embargo, ten en cuenta la siguiente información:
Si tu piel es grasa
Las pieles con textura grasa debes tener especial cuidado en el uso de exfoliantes. La excesiva producción de sebo ocasiona una mayor obstrucción de poros y le agrega al rostro una apariencia oleosa y pesada. Los expertos aconsejan que este tipo de piel debe exfoliarse entre una a dos veces por semana, eso sí, una vez con exfoliantes suaves y una con un exfoliante más completo.
Cuando hablamos de exfoliantes suaves nos referimos a esos exfoliantes cuyas partículas son muy pequeñas, por lo que su acción es más ligera. En cambio, los exfoliantes completos poseen partículas más gruesas que removerán con mayor profundidad las capas de piel muerta.
Si tu piel es seca
Aunque creas que tu piel seca no requiere de exfoliación, lo cierto es que sí, por lo menos una vez a la semana. Las pieles secas se benefician mucho de este paso de la rutina facial, ya que al remover las células de piel muerta la capa superficial de la piel –la epidermis−, se apreciará una apariencia más suave y tersa.
Si tu piel es sensible
Si tienes piel sensible te recomendamos solo exfoliar tu piel una vez cada 10 días, incluso una vez cada dos semanas. Este tipo de piel es más propensa a las laceraciones epidérmicas, por lo que exfoliarla con regularidad solo ocasionará fisuras y rojeces que debilitarán la estructura natural de tu piel.
Pero no te preocupes, hay exfoliantes muy naturales y caseros muy beneficiosos para tu tipo de piel, más adelante te compartiremos nuestros favoritos. Solo recuerda realizar una prueba de alergia horas antes de realizar la exfoliación. Esto tiene como finalidad comprobar que ese día tu piel no esté demasiado sensible y que el proceso no la lastimará.
Aplica una pequeña porción del exfoliante detrás de tu oreja, si no se presenta rojeces o alguna irritación, procede a exfoliar tu cara.
Si tu piel es madura
Muy por el contrario, a lo que muchos creen, la exfoliación en las pieles maduras procura grandes beneficios a la piel. Puesto que contribuirá a la estimulación de la oxigenación celular, tan necesaria a esta edad.
Además, al estar tan profundamente limpia y sin una capa de suciedad y células muertas, la absorción de nutrientes y de los ingredientes activos d las cremas antiedad, penetrarás y serán absorbidos por la piel me manera más eficaz.
Los 9 mejores exfoliantes caseros
Con esta increíble selección de los 9 mejores exfoliantes caseros no te quedará ninguna excusa para no incluir la exfoliación en tu rutina facial. Cada uno es especialmente recomendado para algún tipo de piel en específico, así que solo tienes que aplicar el que se ajuste a las necesidades de tu piel –sea grasa, seca, mixta o sensible−. En cuanto a los ingredientes, es la mejor parte, te aseguramos que más de uno lo podrás hallar directamente en tu refrigerador o tu despensa.
1- Exfoliante casero a base de café
Este es un indispensable, el café ha sido empleado como exfoliante natural hace mucho tiempo y con excelentes resultados. Se recomienda especialmente para pieles grasas y no se aconseja usar en pieles sensibles, pues sus granos no son tan finos y podrían maltratar la piel. Lo mejor del café es que es también antinflamatorio y ayuda a activar la circulación sanguínea.
El café como exfoliante es muy versátil, lo puedes mezclar con aceites naturales, cremas, e incluso, con jabón. Cualquier ingrediente extra que le ayude a ser más manejable en la piel es perfecto para mezclar con nuestro ingrediente estrella: el café.
Cómo hacerlo
Para este exfoliante solo necesitarás:
- Dos cucharadas soperas de café
- Una cucharada de aceite de almendras (o el de tu preferencia)
La elaboración solo consiste en mezclar ambos ingredientes. Antes de aplicarlo lava muy bien tu cara y con la ayuda de tu dedo índice y tu dedo medio toma una cantidad generosa de la mezcla y frota por unos segundos entre los dedos para agregarle algo de calor. Luego procede a aplicar por todo el rostro con movimientos circulares, déjalo actuar unos 5 minutos y retira con agua.
Conoce a profundidad cómo funciona los exfoliantes en tu piel leyendo el siguiente post Qué es y para qué sirve el exfoliante
2- Exfoliante casero a base de polvo de arroz y avena
Este es uno de los exfoliantes caseros más populares en la cultura asiática, y si algo es cierto, es que las mujeres son famosas por lucir cutis tersos y libres de impurezas. El polvo de arroz es un excelente ingrediente por sus cualidades calmantes, lo que lo vuelve perfecto para las pieles sensibles. También ayuda a combatir el acné y por supuesto, exfolia –esto gracias a su contenido de vitamina B y ácido fítico, lo que remueve células muertas con eficacia−.
Cómo hacerlo
Para la elaboración de este eficaz exfoliante necesitarás:
- Media taza de arroz blanco
- Una cucharada de avena
- 2 cucharadas de aceite de coco
Si tienes la facilidad de encontrar polvo de arroz, perfecto, puedes saltarte el primer paso.
- Vierte la media taza de arroz en la licuadora, usa la velocidad media hasta que observes que los granos se volvieron polvo.
- En un envase limpio agrega dos cucharadas del polvo de arroz, el resto lo puedes guardar en un envase de vidrio para usarlo después.
- Agrega la cucharada de avena y las cucharadas de aceite.
- Mezcla todo y aplícalo en el rostro usando movimientos suaves y circulares.
- Déjalo actuar por 10 minutos y retira con agua.
3- Exfoliante de fresa y yogurt
Lo más difícil en la preparación de este exfoliante es resistir las ganas de hacerte un batido. Las fresas tienen un alto nivel antioxidante y te ayudará a nivelar el pH de tu piel, mientras que sus semillas son ideales para exfoliar. Además, se incluye los múltiples beneficios del yogurt que, entre ellos destaca su capacidad de humectar y exfoliar la piel, sin duda, una dupla de nivel.
Cómo se hace
- Cuatro (4) fresas maduras.
- Tres (3) cucharadas de yogurt natural sin ningún endulzante.
Esta es una de las recetas caseras más sencillas, pues solo necesitas triturar las cuatro fresas en un envase hondo y agregar las cucharadas de yogurt, mezclarlos, y listo. Aplica en el rostro y realiza sutiles masajes, siempre con movimientos circulares ascendentes. Deja actuar por 10 minutos y retírala.
4- Exfoliante de avena y miel
Dos ingredientes de toda la vida que no pueden faltar en tu despensa. Es apta para todo tipo de piel tanto para las pieles sensibles como las de textura grasa. La avena es un exfoliante natural muy completo pues tiene triple capacidad: limpiar, exfoliar y aliviar. Esto lo convierte en una opción manejable y efectiva. Mientras que la miel le aporta un plus antiséptico muy beneficioso.
Cómo se hace
- Dos (2) cucharadas de avena en hojuelas si tu piel es grasa o en harina si tu piel es sensible.
- Dos (2) cucharadas de miel.
La elaboración es muy simple, debes mezclar ambos ingredientes y listo. Aplica la mezcla iniciando en la nariz y mejillas, luego la frente y finaliza en la barbilla. Siempre emplea movimientos suaves, nunca presionando la piel.
5- Exfoliante casero a base de azúcar y aceite de oliva
Para la elaboración de este exfoliante casero necesitarás azúcar extra refinada. Evita el azúcar de cristales grandes, estos pueden ocasionar laceraciones epidérmicas que perjudicarán tu piel.
El secreto para que el azúcar se vuelva tu aliado en la rutina de exfoliación es mezclarlo con algún aceite, con esto no solo añadirás un plus de hidratación, sino que, además, volverá el azúcar más manejable en el rostro y logrará disolver sutilmente los cristales de azúcar para que su acción en la piel no sea tan agresiva.
Cómo se hace
Esto es súper simple de preparar, solo tienes que mezclar una cucharada de azúcar con dos cucharadas de aceite, en este caso te recomendamos el aceite de oliva porque su textura no es tan densa y permitirá que los cristales reduzcan un poco su tamaño, pero tú puedes usar el que más te guste o se adecue a tu tipo de piel.
Aplica en todo el rostro, haciendo especial énfasis en la zona T –frente, nariz y mentón−. Siempre emplea movimientos circulares ascendentes y nunca presiones con fuerza la piel.
6- Exfoliante de miel y almendras
Un indispensable para las pieles secas. Este exfoliante a base la miel orgánica te brindará suavidad y brillo. Las almendras serán el agente exfoliante y como podrás sospecha, será necesario volverlas polvo para que puedan limpiar la piel sin correr el riesgo de fisuras epidérmicas ni ninguna laceración que ponga en riesgo la salud de tu cara.
Cómo se hace
Necesitarás un puñado de almendras y dos cucharadas de miel. Con la ayuda de una licuadora tritura todas las almendras hasta que se conviertan en un fino polvo con consistencia arenosa, agrega las cucharadas de miel y mezcla muy bien. Ahora solo tienes que aplicar en tu cara ligeramente húmeda y realizar masajes en toda la zona, siempre procurando evitar el área de los ojos y ojeras.
7- Exfoliante de bicarbonato y limón
Esta es un exfoliante casero reservado, exclusivamente, para las pieles de textura sumamente grasosas, esas pieles cuya producción de sebo parece un poco fuera de control. No lo realices más de dos veces al mes y bajo ninguna circunstancia te expongas al sol usando esta mezcla, podría ocasionar manchas por la acidez del limón.
Con este exfolian te no solo limpiarás tu piel, sino que la acidez de ambos ingredientes te ayudará a nivelas el pH y a controlar el sebo que ocasiona esa apariencia oleosa.
Cómo se hace
En un recipiente vierte dos cucharadas de bicarbonato y agrega el jugo de medio limón, remueve hasta que se forme una mezcla homogénea y aplica en toda la cara, evitando el área de ojos y boca. No dejes actuar más de 5 minutos y retira con abundante agua.
8- Exfoliante de chocolate
El chocolate es delicioso, un afrodisiaco natural y un excelente ingrediente para la elaboración de recetas faciales. El chocolate tiene propiedades antinflamatorias y regenerativas, siendo una increíble opción para mejorar la apariencia del acné e irritaciones cutáneas. Para aprovechar estos beneficios, al mismo tiempo que exfoliamos la piel, solo necesitaremos de cacao en polvo.
Cómo se hace
Realizar este exfoliante es tan simple como mezclar en un recipiente de vidrio o plástico dos cucharadas de cacao en polvo con dos cucharadas de algún aceite natural. Una dupla increíble es el aceite de almendras o ricino, ya que la mezcla de ambos ingredientes tendrá un efecto relajante por sus deliciosos aromas.
9- Exfoliante de plátano
Exfoliación + nutrición profunda= cutis terso y lleno de vitalidad. Esto es lo que te ofrece esta sencilla pero efectiva receta casera para exfoliar la cara. El plátano maduro es rico en antioxidantes e hidratantes, es sin duda una de las frutas más usadas para tratamientos de belleza. Para potenciar este ingrediente solo tienes que añadir una cucharada de azúcar y listo.
Cómo se hace
Con la ayuda de un tenedor, pica y tritura el plátano entero hasta que se convierta en un puré. Agrega la cucharada de azúcar y mezcla. Aplica en todo el rostro con movimientos sutiles y circulares, prestando mayor atención en la zona T. Luego retira con abundante agua fría.
Las ventajas de usar un exfoliante facial casero
Lo bueno nunca pasará de moda y los tratamientos de belleza casero son una prueba fidedigna de ello. El usar productos caseros para cuidar nuestra piel, nuestro pelo, y cuidar nuestra salud en general siempre será una apuesta segura. Las ventajas son muchas y queremos hacerte un pequeño conteo para que te asegures de ello:
- Es igual de efectivo: usar productos caseros para realizar exfoliantes faciales te dará los mismos resultados que un producto químico. Si no nos crees, solo tienes que ver las etiquetas de la mayoría de los exfoliantes comerciales, en ellos apreciarás cómo ofrecen productos con ingredientes naturales, porque en lo natural está el verdadero poder.
- Ahorraras dinero: esto no le cae mal a ningún bolsillo. Los productos comerciales suelen enamorarnos con coloridos empaques y atrayente publicidad, pero el impacto que tienen sus precios en nuestro presupuesto parece mayor que el que tendrá en nuestra piel. Cuando optas por exfoliantes faciales naturales no solo aplicas algo que funciona sino que lo haces a solo un tercio de su precio.
- Sabes qué estas usando: la variedad es mucha y cuando nos enfrentamos a ella solemos inclinarnos por los exfoliantes con precios más accesibles y esta es un arma de doble filo. Las firmas en la búsqueda de reducir costos incluyen ingredientes de mala calidad, en cambio cuando usas productos caseros estarás segura de lo que estas aplicando en tu rostro, por lo que te asegurarás que todo sea bueno para la salud epidérmica.
- Cuidas el medio ambiente: por último, pero no menos importante, cuando usas productos naturales reduces el impacto de tu huella ambiental. La industria de fabricación de envases de plástico es una de las más nocivas para el ambiente, especialmente para la vida marina, así que toma cartas en el asunto y disminuye la adquisición de productos de plástico.
Ahora que sabes cómo hacerlos, necesitarás las mejores técnicas de aplicación, descúbrelas en Cómo exfoliar la piel del rostro
Ahora que tienes esta increíble selección de exfoliantes caseros solo tendrás que elegir cuál es tu favorito e incluirlo en tu rutina, lo mejor de todo es que puedes probar varios y deducir cuál es más beneficioso en tu tipo de piel. Simplemente el cómo crear un exfoliante facial casero, es uno de los pasos más sencillos, así que no dudes en intentarlo.
Gracias por leernos, nos vemos en una próxima oportunidad con más consejos para ti.